Encontrar la fórmula para terminar de una vez y para siempre con los pelos molestos es el sueño de muchas personas. Algunos ya probaron sistemas que prometían una depilación definitiva en pocas sesiones, pero comprobaron que finalmente el procedimiento debía repetirse infinitamente para lograr un resultado aceptable. Otros desistieron en el intento y volvieron a los métodos antiguos y dolorosos, como la cera o las maquinitas eléctricas. Para los que siguen sin hallar la respuesta a este problema, las novedades son positivas. Ya pisa fuerte el método que realmente brinda soluciones duraderas después de un tratamiento corto y efectivo.